Los primeros dinosaurios
El comienzo de una nueva era: la Era de los “lagartos terriblemente grandes”
A comienzos del Mesozoico, hace entre 240-230
millones de años, aparece un grupo de reptiles terrestres que poblaron la
Tierra hasta hace 66 millones de años, los dinosaurios. Comenzaba así la Era de
los “lagartos terriblemente grandes”, animales cuyos descendientes continúan hoy
entre nosotros: las aves.
Cuando sucedió
Los dinosaurios aparecieron durante el Triásico, hace aproximadamente entre 240-230 millones de años, cuando la Tierra formaba un único supercontinente denominado Pangea.
Los dinosaurios conformaron un grupo de animales exitoso, si bien, y a pesar de su rápida diversificación, durante el Triásico no fueron los vertebrados dominantes, es durante el Jurásico cuando comienzan a ganar protagonismo y la progresiva separación de los continentes, que se produce a lo largo del Cretácico, origina una mayor diferenciación faunística, adquiriendo múltiples formas y estilos de vida.
Qué sucedió
A mediados del Triásico, la desaparición de algunos reptiles y anfibios que hasta entonces habían sido los vertebrados dominantes en el planeta dio paso a un grupo de animales denominados arcosaurios (literalmente significa “lagarto dominante”). ¡Fue el grupo de vertebrados más diverso y exitoso del Mesozoico!
El grupo de los arcosaurios está representado por dos linajes, uno incluye a los cocodrilos y el otro engloba a los pterosaurios (reptiles voladores) y a los dinosaurios.
Pero, ¿cómo era el primer dinosaurio? El primer dinosaurio en tener el honor de iniciar la historia de este grupo de reptiles sería un pequeño dinosaurio carnívoro de aproximadamente un metro de longitud, grácil y bípedo.
A partir de este dinosaurio ancestral evolucionaron el resto de dinosaurios, distinguiendo dos grupos, saurisquios y ornitisquios, en función de la orientación de un hueso de la cadera, concretamente del pubis. En los saurisquios (el término significa “cadera de reptil”), el pubis está orientado hacia adelante (fig. 1) mientras que en los ornitisquios (el término significa “cadera de ave”) está orientado hacia atrás (fig. 2).
Curiosamente el linaje de las aves se encuentra dentro del grupo de los ornitisquios. ¿Cómo puede ser? Esto se debe a que la clasificación solo tiene en cuenta la similitud de la pelvis de los dinosaurios con las aves o lagartos, sin considerar la relación de parentesco entre ellos.
Los dinosaurios no avianos desaparecieron hace 66 millones de años en un evento que podrás descubrir a lo largo de la Línea del Tiempo Geológico.
Desenmascarando a los falsos dinosaurios
Hoy en día parece que cualquier reptil gigante extinto fuera un dinosaurio, pero la verdad es que existieron dinosaurios grandes, medianos y pequeños.
Los dinosaurios habitaron la Tierra durante más de 170 millones de años y compartieron el planeta con otras criaturas, mientras estos eran los protagonistas en tierra firme, los pterosaurios eran los señores de los cielos y reptiles marinos como mosasaurios (fig. 3) surcaban los mares. Pero… ¿cómo se puede diferenciar un dinosaurio del resto de los reptiles?
Un dinosaurio es un vertebrado que posee cuatro extremidades (tetrápodo) y que se reproduce a través de huevos (amniota). La principal diferencia que presenta con respecto del resto de los reptiles se encuentra en la disposición de sus extremidades. En los dinosaurios las extremidades se proyectan rectas, directamente por debajo del cuerpo, adquiriendo por tanto una posición erguida.
Con todo, estas son las claves que te ayudarán a identificar un dinosaurio ya que se caracteriza por:
- poseer 4 patas,
- poner huevos en tierra firme,
- tener las extremidades colocadas verticalmente debajo del cuerpo,
- presentar un cráneo con dos aberturas detrás de cada órbita
- caminar de forma digitígrada, es decir, sobre la punta de sus dedos
Sabías que ...
El primer dinosaurio en ser nombrado fue Megalosaurus, en 1824, gracias al geólogo y naturalista británico William Buckland, sin el saberlo, ya que fue Sir Richard Owen en 1842 quien acuñó el término dinosaurio que literalmente significa “lagarto terrible”.
Figura 1: Los dinosaurios saurisquios, entre los cuales se encuentran los sauropodomorfos y los dinosaurios carnívoros, tienen el pubis orientado hacia adelante.
Figura 2: Los dinosaurios ornitisquios, entre los cuales se encuentran los ornitópodos, los tireóforos y los marginocéfalos, tienen el pubis orientado hacia atrás.
Figura 3: ¡Esto no es un dinosaurio! Reptiles marinos como los mosasaurios son habitualmente confundidos con dinosaurios.
Por qué sucedió
Si bien entre los primeros dinosaurios y el resto de vertebrados terrestres hubo una competencia por el medio y en un principio el planteamiento más clásico apuntaba a la superioridad de los dinosaurios frente a sus posibles competidores para su avance, la hipótesis de su éxito con la que los paleontólogos y paleontólogas trabajan en la actualidad es que se deba a la extinción de algunos reptiles y anfibios durante el Triásico. Estos dejarían nichos ecológicos vacíos, que fueron ocupados por los primeros dinosaurios que presentaban innovaciones evolutivas, entre ellas la disposición de las patas en posición vertical, aspecto que facilitaría sus movimientos y sería más rentable desde el punto de vista energético.
Cómo lo sabemos
La aparición de los primeros dinosaurios viene marcada por el descubrimiento de sus restos fósiles, ya sean huesos (fósiles directos) o evidencias de su actividad como pueden ser huellas, huevos, coprolitos (heces fósiles) o gastrolitos (piedras con bordes redondeados, ingerida por un dinosaurio para ayudar a la trituración de los alimentos).
Hasta la fecha, los yacimientos más antiguos que se conocen con restos de dinosaurios datan del Triásico de Sudamérica (Argentina y Brasil), África, India y Reino Unido, teniendo a Eoraptor (fig. 4) o Herrerasaurus como alguno de sus protagonistas.
Figura 4: Comparativa del tamaño de un Eoraptor con una persona.
